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10 Misterios de la Psicología
¿Qué es la conciencia? Aunque todos la experimentamos, la naturaleza de la conciencia sigue siendo uno de los mayores enigmas. ¿Es solo el resultado de la actividad neuronal o hay algo más?
El origen del lenguaje: ¿Cómo y por qué los humanos desarrollamos la capacidad de comunicarnos a través de un lenguaje complejo? ¿Nació de la necesidad social o de una mutación biológica?
¿Por qué soñamos? Hay varias teorías, desde que es una forma de procesar emociones y recuerdos hasta que es simplemente el cerebro haciendo «limpieza». Sin embargo, nadie sabe con certeza la función de los sueños.
La naturaleza de la memoria: ¿Cómo y dónde almacena el cerebro nuestros recuerdos? ¿Por qué algunos son tan vívidos y duraderos, mientras que otros se desvanecen tan fácilmente?
El libre albedrío: ¿Tomamos decisiones de forma consciente y autónoma, o nuestras acciones están predeterminadas por nuestros genes, entorno y procesos neuronales?
El misterio del placebo: ¿Cómo puede una pastilla de azúcar aliviar el dolor o curar enfermedades? Este efecto demuestra el poder de la mente sobre el cuerpo, pero los mecanismos exactos siguen siendo un misterio.
¿Por qué sufrimos de enfermedades mentales? Aunque hemos avanzado mucho en la comprensión de trastornos como la depresión, la esquizofrenia y el trastorno bipolar, las causas exactas y las mejores formas de tratamiento siguen siendo un área de intensa investigación.
El efecto de la experiencia en el cerebro: Sabemos que el cerebro es plástico y cambia con la experiencia, pero ¿cómo se traduce exactamente una nueva habilidad o un trauma en una reconfiguración física y funcional de las neuronas?
La naturaleza de la creatividad: ¿Qué impulsa a algunas personas a crear obras de arte, música o innovaciones científicas que cambian el mundo? ¿Puede enseñarse la creatividad o es un rasgo innato?
El origen del altruismo: Desde una perspectiva evolutiva, ¿por qué ayudamos a otros a expensas de nuestro propio bienestar? ¿Es un comportamiento aprendido o una inclinación biológica?
Estos misterios son la fuerza motriz detrás de la psicología y la neurociencia. Cada respuesta nos acerca un poco más a comprender lo que nos hace humanos.
100 Sesgos Cognitivos
Los sesgos cognitivos representan desviaciones sistemáticas en nuestro proceso de pensamiento que distorsionan la forma en que interpretamos la información. Estas inclinaciones no son accidentales, sino que están profundamente enraizadas en nuestra manera de razonar y actuar, usualmente basadas en nuestra historia personal y convicciones. Si bien actúan como herramientas prácticas para la toma de decisiones ágil, también tienen el potencial de llevarnos a cometer errores.
Sesgos relacionados con la toma de decisiones
Sesgo de confirmación – Buscar, interpretar y recordar información que confirma nuestras creencias preexistentes.
Sesgo de anclaje – Depender demasiado de la primera información que recibimos (el «ancla») para tomar una decisión.
Heurística de disponibilidad – Sobreestimar la probabilidad de eventos que vienen fácilmente a la mente.
Sesgo de resultado – Juzgar una decisión basándose en el resultado final, en lugar de en la calidad de la decisión en el momento en que se tomó.
Falacia del jugador – Creer que un evento aleatorio tiene más o menos probabilidades de ocurrir porque ha ocurrido (o no) en el pasado.
Sesgo de aversión a la pérdida – El dolor de una pérdida es psicológicamente más poderoso que el placer de una ganancia equivalente.
Efecto de encuadre (Framing Effect) – Las conclusiones cambian dependiendo de cómo se presenta la información.
Sesgo de arrastre (Bandwagon effect) – La tendencia a hacer o creer cosas porque muchas otras personas lo hacen.
Falacia del costo hundido – Continuar invirtiendo en un proyecto porque ya se ha invertido mucho, incluso si los resultados no son buenos.
Sesgo de exceso de confianza – Sobreestimar nuestras propias capacidades, conocimientos y juicio.
Efecto Dunning-Kruger – La tendencia de las personas incompetentes a sobrestimar su habilidad, mientras que las competentes la subestiman.
Sesgo de impacto – Sobreestimar la intensidad y duración de nuestras futuras reacciones emocionales.
Sesgo de autoridad – Dar más peso a la opinión de una figura de autoridad, incluso si no es experta en el tema.
Sesgo de status quo – Preferir que las cosas se mantengan como están.
Sesgo de la creencia en un mundo justo – La tendencia a creer que el mundo es justo y que la gente se merece lo que le pasa. Sesgos sociales y de percepción
Efecto halo – Juzgar a una persona positivamente basándose en una sola característica favorable.
Sesgo de atribución fundamental – Atribuir la conducta de los demás a su personalidad o carácter, mientras que ignoramos los factores situacionales.
Efecto de falso consenso – Sobreestimar cuántas personas están de acuerdo con nuestras propias creencias y comportamientos.
Sesgo de punto ciego (Blind-spot bias) – No reconocer nuestros propios sesgos cognitivos, pero verlos fácilmente en los demás.
Sesgo de autoservicio (Self-serving bias) – Atribuir los éxitos a nuestras propias habilidades y los fracasos a factores externos.
Sesgo de endogrupo (In-group bias) – Favorecer a los miembros de nuestro propio grupo social.
Sesgo de proyección – Asumir que los demás comparten nuestras mismas actitudes, valores y creencias.
Efecto de la mera exposición – Desarrollar una preferencia por cosas simplemente porque nos resultan familiares.
Efecto del observador-expectativa – Las expectativas de un investigador influyen en los resultados de su estudio.
Sesgo de género – La preferencia por un género sobre otro.
Sesgo de belleza – Atribuir cualidades positivas a personas físicamente atractivas.
Efecto de la ilusión de la verdad – Creer que una afirmación es verdadera porque la hemos escuchado repetidamente.
Efecto de descarte de la disonancia – La incomodidad que sentimos cuando nuestras creencias entran en conflicto con nueva información.
Sesgo de la ilusión de control – Creer que podemos controlar o influir en resultados que son puramente aleatorios.
Sesgo de optimismo – Creer que somos menos propensos a experimentar eventos negativos que otras personas. Sesgos de memoria
Sesgo de retrospección (Hindsight bias) – «Lo sabía desde el principio.» La tendencia a ver los eventos pasados como predecibles.
Sesgo de memoria selectiva – Recordar solo la información que apoya nuestra visión actual.
Sesgo de falsos recuerdos – Creer que un evento ocurrió cuando en realidad no fue así.
Sesgo de desvanecimiento afectivo – La tendencia a olvidar las emociones negativas más rápido que las positivas.
Sesgo de la novedad – Dar más peso a la información reciente en nuestra toma de decisiones.
Sesgo de primacía – Recordar mejor los primeros elementos de una lista.
Efecto de reminiscencia – La memoria de un evento aumenta con el tiempo.
Sesgo de memoria para los detalles – Recordar detalles específicos, pero no la imagen completa de un evento.
Sesgo de la información que falta – Ignorar la información que no está presente.
Sesgo de confirmación de la memoria – Recordar eventos de manera que apoyen nuestras creencias. Otros sesgos y fenómenos
Sesgo de atención – Prestar atención a ciertas cosas e ignorar otras.
Efecto Pigmaleón – Las altas expectativas de alguien sobre otra persona pueden llevar a un mejor desempeño de esa persona.
Efecto Hawthorne – Las personas modifican su comportamiento al saber que están siendo observadas.
Efecto de la tercera persona – Creer que los mensajes mediáticos influyen más en los demás que en nosotros mismos.
Sesgo de la normalidad – Rehusarse a planificar o reaccionar ante un desastre porque se cree que no nos sucederá.
Efecto de la ilusión de la frecuencia (Baader-Meinhof phenomenon) – Una vez que aprendes algo nuevo, parece que lo ves por todas partes.
Sesgo de negatividad – Dar más peso a los eventos negativos que a los positivos.
Sesgo de la ilusión de los grupos – Ver patrones en datos aleatorios.
Sesgo de elección de apoyo – Tendencia a recordar nuestras elecciones pasadas de forma más favorable de lo que realmente fueron.
Efecto del actor-observador – Atribuir nuestros propios actos a factores externos, pero los de los demás a su personalidad.
Sesgo de la autosuficiencia – Creer que podemos manejar cualquier situación.
Sesgo de la falsa unicidad – Creer que nuestras habilidades son únicas y raras.
Sesgo de la ignorancia pluralista – Un grupo de personas cree algo, pero cada individuo cree que es el único que lo cree.
Efecto del rebaño – La tendencia de las personas a seguir a la multitud.
Sesgo de la familiaridad – Preferir lo que ya conocemos.
Sesgo de la ilusión de la transparencia – Sobreestimar la medida en que los demás pueden leer nuestros estados mentales.
Sesgo de la falacia de la planificación – Subestimar el tiempo y los recursos necesarios para completar una tarea.
Sesgo de la negligencia de la línea base – Ignorar la información estadística general y centrarse en la información específica.
Sesgo de representatividad – Juzgar la probabilidad de algo basándose en lo similar que es a un prototipo.
Efecto de la rima como razón – Las rimas hacen que las afirmaciones parezcan más verídicas.
Efecto de la dotación – Asignar más valor a algo simplemente porque es nuestro.
Sesgo de la sobrejustificación – La motivación intrínseca disminuye al ser recompensado por algo que ya se disfrutaba.
Efecto de recencia – Recordar mejor la información más reciente.
Sesgo de la falacia del jugador inverso – Creer que los eventos pasados raros harán que los futuros sean más probables.
Efecto de la ilusión del control social – Creer que podemos influir en el comportamiento de los demás más de lo que realmente podemos.
Sesgo de la falacia de la conjunción – Creer que la combinación de dos eventos es más probable que uno de ellos solo.
Sesgo de la negligencia de la duración – Ignorar la duración de una experiencia y basar los juicios en los picos y el final.
Sesgo de la falacia de la tasa base – Ignorar la probabilidad previa de un evento al evaluar una situación.
Sesgo de la ilusión del consenso – Creer que nuestros amigos son una muestra representativa de la población.
Sesgo de la ilusión de la verdad retrospectiva – Creer que siempre supimos la verdad de algo después de que se revela.
Sesgo de la creencia en la recompensa – Creer que el esfuerzo siempre será recompensado.
Sesgo de la falacia del Nirvana – Comparar soluciones reales con soluciones ideales, lo que hace que las soluciones reales parezcan peores.
Sesgo de la falacia de la historia – Asumir que una historia simple y coherente es más probable que una compleja.
Sesgo de la falacia del «no hay nada que perder» – Asumir que una acción sin riesgo aparente no tendrá consecuencias negativas.
Sesgo de la falacia de la experiencia – Creer que nuestra experiencia personal es más importante que los datos o la ciencia.
Sesgo de la falsa atribución – Atribuir la causa de un evento a un factor incorrecto.
Sesgo de la falacia del tirador texano – Encontrar patrones después de que los datos ya han sido recolectados, lo que hace que parezca que hay un patrón real.
Sesgo de la falacia de la regresión a la media – Atribuir una mejora a una intervención cuando en realidad es una fluctuación aleatoria.
Sesgo de la ilusión de control de la suerte – Creer que podemos influir en el azar.
Sesgo de la falacia del «argumento por las consecuencias» – Considerar las consecuencias de una creencia como una prueba de su falsedad o veracidad.
Sesgo de la falacia del «hombre de paja» – Distorsionar el argumento de un oponente para que sea más fácil de refutar.
Sesgo de la falacia del «ad hominem» – Atacar a la persona que presenta el argumento, en lugar de al argumento en sí.
Sesgo de la falacia de la falsa analogía – Asumir que dos cosas son similares en todos los aspectos porque son similares en algunos.
Sesgo de la falacia del «tu quoque» – Descartar un argumento porque la persona que lo presenta es hipócrita.
Sesgo de la falacia de la ambigüedad – Usar un término de manera que tenga dos o más significados en un mismo argumento.
Sesgo de la falacia del «argumento de la ignorancia» – Asumir que algo es verdadero porque no se ha demostrado que sea falso.
Sesgo de la falacia de la pendiente resbaladiza – Creer que una acción llevará a una serie de eventos negativos inevitables.
Sesgo de la falacia del «appeal to tradition» – Creer que algo es bueno porque siempre se ha hecho así.
Sesgo de la falacia del «appeal to novelty» – Creer que algo es bueno porque es nuevo.
Sesgo de la falacia del «appeal to fear» – Usar el miedo para convencer a alguien de algo.
Sesgo de la falacia del «appeal to emotion» – Usar emociones en lugar de lógica para convencer.
Sesgo de la falacia del «appeal to popularity» – Creer que algo es verdad porque es popular.
Sesgo de la falacia del «appeal to nature» – Creer que algo es bueno porque es natural.
Sesgo de la falacia del «appeal to ridicule» – Burlarse de una idea para desacreditarla.
Sesgo de la falacia del «appeal to poverty» – Creer que los pobres son más virtuosos.
Sesgo de la falacia del «appeal to wealth» – Creer que los ricos son más inteligentes.
Sesgo de la falacia del «appeal to pity» – Usar la compasión para convencer.
Sesgo de la falacia del «appeal to moderation» – Creer que el punto medio entre dos extremos siempre es la mejor opción.
Sesgo de la falacia del «no hay verdadero escocés» – Descartar un contraejemplo de una generalización.
Efecto de la ilusión de la superioridad moral – Creer que somos más morales que los demás